El panorama es devastador. Lo muestran las imágenes de la tragedia y lo resume la voz de la gobernadora de Putumayo, Sorrel Aroca, cuando resume en pocas palabras la dimensión de la emergencia que vive desde la noche del viernes la ciudad de Mocoa. “Nadie lo esperaba. Por las fuertes lluvias colapsaron todas las quebradas y los ríos que circundan a Mocoa”.

A los muertos y desaparecidos se suman las pérdidas materiales. El lodo afectó a 17 barrios. Otros dos desaparecieron. “En algunos barrios cayeron piedras del tamaño de casas”, describió Aroca. Los barrios populares de San Miguel y La Independencia quedaron destruidos. “Tenemos muchos desaparecidos. El paisaje es de desastre. El terror está vivo. Es una tragedia de la comunidad”. (Lea: Causas y recomendaciones tras la avalancha en Mocoa).

Los barrios afectados no fueron únicamente los que están al lado de las quebradas, sino también algunos del centro de Mocoa, donde varios puentes tienen afectadas sus bases. Por eso le estamos pidiendo a la gente que no los use. La infraestructura también sufrió daños. Hasta ayer, Mocoa y tres municipios aledaños estaban sin luz, porque la avalancha también destruyó la subestación eléctrica. (Galería: Las desgarradoras fotos que deja la avalancha en Mocoa) 

Después de la avalancha se activó el plan de contingencia desde las 11:00 de la noche y en el Comando de la Policía se instaló el Puesto de Mando Unificado (PMU) con la Sexta División, la Policía, la Gobernación, los Bomberos, la Cruz Roja, y se establecieron prioridades en cuanto a atención y evacuación. “La magnitud de la emergencia fue tal que, pese al número de funcionarios, socorristas, policías y soldados, el personal no da abasto”.

“Necesitamos personal médico, socorristas y elementos para albergues. Camillas, colchonetas, frazadas, vehículos para remitir personas heridas. Refuerzos aéreos”, clamó la gobernadora, al explicar que ya fue superada la capacidad para albergar damnificados. Habilitamos coliseos o aulas educativas. Hay gente refugiada en la Policía. Se declaró la emergencia sanitaria pero el hospital colapsó.

Estamos organizando otros puntos para recibir damnificados en zonas seguras. Habilitamos la villa olímpica, los colegios y el Instituto Tecnológico del Putumayo para recibirlos. La gobernadora recalcó que se habilitó un canal a través de la página web de la gobernación. “Que nos ayuden con alimentos, ropa, frazadas, con materiales… con todo lo que tenga el país y se quiera solidarizar”.

El general Francisco Javier Ricci, comandante de la Sexta Brigada del Ejército, indicó que las Fuerzas Militares están apoyando a los organismos y autoridades. “El Ejército dispuso de dos aviones, que llevaron 90 hombres de la Brigada de Atención de Desastres. De igual manera, hay cuatro helicópteros para trasladar a los heridos”. Lo que más se necesita son alimentos no perecederos, y carpas y plásticos para adecuar albergues. Además, mucha agua, botas de caucho, plantas eléctricas y combustible. “No sabemos si hay más riesgos. Sólo esperamos que se detenga el invierno”